El pasado sábado 16 de enero se celebró en Málaga un acto en Solidaridad con los inmigrantes, convocado por el Movimiento Cultural Cristiano y el Partido SAIn (Solidaridad y Autogestión Internacionalista). Se realizó con motivo de la Jornada Mundial del Emigrante y el Refugiado que convoca la Iglesia católica.
Este acto comenzó con una marcha bajo el lema ‘LOS INMIGRANTES SON PERSONAS, NO MERCANCÍA’ por las calles céntricas de la ciudad. Con salida en la Plaza de la Constitución y terminando con una concentración en la Plaza de Capuchinos, frente al CIE (Centro de Internamiento para Extranjeros), símbolo y realidad de la opresión contra los inmigrantes en Málaga.
A esta marcha asistió alrededor de un centenar de personas. Y entre ellas diversos colectivos y asociaciones de inmigrantes. Posteriormente en la concentración, y tras unos emotivos testimonios, intervino Agustin Ndour, senegalés y militante del Movimiento Cultural Cristiano.
Quiso denunciar cómo todos los mecanismos de represión contra los inmigrantes provocan muerte y sufrimiento, y dejan a millones de inmigrantes sin ningún derecho (8 millones de sin papeles en Europa) que junto a las altas tasas de paro artificialmente provocado hacen que la sociedad sufra control y disciplina, obligándoles a soportar cualquier explotación laboral para conseguir o conservar su empleo y no perder los permisos de residencia o el temor a ser denunciado y deportado.
Y es que el paro y la represión contra los inmigrantes tienen la misma causa: un sistema económico mundial que busca en cada operación el máximo beneficio.
Por todo esto se plantearon los siguientes puntos:
* Denuncia de los mecanismos de represión:
- Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE): 220 en territorio europeo, y otros más de 100 financiados en países empobrecidos. Un hecho de los procesos de externalización de fronteras que convierte a los propios africanos en gendarmes de sus propios compatriotas
- Agencia FRONTEX, SIVE: financiada con más de 100 millones de € (más de 16 mil millones de Ptas.). Todo un ejército para impedir que las personas hambrientas se acerquen a las fronteras europeas. Y financiado por la política criminal de la Unión Europea.
- Leyes de extranjería, Directiva de Retorno, Tratado de Schengen: leyes inmorales que atentan contra los derechos fundamentales de la persona como la libertad de movimiento, la sanidad, la educación y la indefensión ante la explotación laboral o mafiosa. Un exponente de todo esto es el actual gobierno del PSOE, con la última Ley de Extranjería y el Plan África.
* Ante este panorama, y como dice también toda la Iglesia universal:
- Dignidad sagrada de la persona, por encima del lucro y los intereses de unos pocos.
- Derecho a emigrar y a no tener que emigrar, es decir, que en el propio país se creen condiciones dignas para todos.
– Eliminar los mecanismos comerciales y financieros de robo a los países empobrecidos y restitución de lo robado.
- “Para la Iglesia nadie es extranjero”.
- “El emigrante es una persona humana con derechos fundamentales inalienables que todos deben respetar siempre”. (Según la encíclica Caritas in Veritate).
- Promoción de una cultura solidaria y autogestionaria. Caridad política para transformar las instituciones asesinas en instituciones solidarias.
* Finalmente el acto concluyó con las siguientes exigencias:
- Eliminación de los sistemas de control de fronteras: el Frontex y el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior que provocan miles de muertos.
- El cierre inmediato de todos los Centros de Internamiento: los del mundo entero, especialmente los silenciados en el Norte de África.
- La derogación de la ley de extranjería y de la Directiva de Retorno. Salida inmediata del espacio Schengen.
¡NI FRONTERAS, NI BANDERAS!
Autor: Partido Sain de Málaga.
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